La revolución del blockchain y las criptomonedas: ¿Qué nos espera en los próximos cinco años?
Columnas miércoles 23 de abril de 2025 - 01:00
Imagina un mundo donde pagas tu café con una moneda digital, compras una fracción de un departamento en otro país desde tu celular, o donde los bancos ya no son los únicos que controlan tu dinero. Esto no es ciencia ficción: es el futuro que están moldeando el blockchain y las criptomonedas, dos tecnologías que están cambiando cómo entendemos el dinero y las inversiones. Cada día escuchamos más sobre ellas, y todo apunta a que en los próximos cinco años veremos una revolución que transformará la economía como la conocemos.
Primero, hablemos de las criptomonedas. Estas monedas digitales, como Bitcoin o Ethereum, permiten hacer transacciones de compra y venta de bienes y servicios sin intermediarios, como bancos o gobiernos. Funcionan gracias al blockchain, un registro descentralizado y seguro que guarda cada movimiento, como un libro contable que nadie puede alterar. Aunque el mundo ha dudado sobre su adopción, unos las ven como el futuro, otros como una moda, los hechos muestran que están ganando terreno. Países como El Salvador ya aceptan Bitcoin como moneda oficial, y otros, como México, Brasil y la Unión Europea, trabajan en regulaciones para legalizarlas o crear sus propias monedas digitales respaldadas por gobiernos, conocidas como CBDC (monedas digitales de bancos centrales). Por ejemplo, China ya prueba el yuan digital, y México explora un peso digital para 2025. Esto nos dice que, lejos de desaparecer, las criptomonedas están aquí para quedarse.
Pero la revolución no se queda en las monedas. Una de las tendencias más emocionantes es la tokenización, que está cambiando cómo invertimos. Con blockchain, podemos convertir activos físicos, como casas, autos o incluso obras de arte, en tokens digitales. Estos tokens representan una parte o la totalidad de ese activo, y cualquiera puede comprarlos desde su celular. Imagina tener un pedacito de un edificio en Polanco o una villa en Cancún sin ser millonario. En el sector inmobiliario, por ejemplo, la tokenización permite invertir en propiedades y ganar dinero por su renta o valorización, todo de forma transparente y sin trámites interminables. Plataformas como RealT ya lo hacen en Estados Unidos, y en México startups como Briq están entrando al juego. Esto democratiza la inversión: no necesitas ser rico para ser dueño de algo valioso, solo una conexión a internet.
Entonces, ¿qué significa esto para el futuro? Primero, la banca está en jaque. Si las criptomonedas y el blockchain eliminan intermediarios, ¿para qué necesitas una cuenta bancaria tradicional? Los bancos ya lo saben y están adaptándose: algunos, como JPMorgan, crean sus propias monedas digitales, mientras otros ofrecen servicios para guardar criptomonedas. Pero el cambio no será fácil. El dinero en efectivo podría volverse obsoleto, como ya pasa en países como Suecia, donde casi todo se paga con apps o tarjetas. Los depósitos en bancos y los cambios de divisas también cambiarán: con blockchain, transferir pesos a dólares o euros será instantáneo y más barato, sin comisiones absurdas.
Sin embargo, no todo es color de rosa. La adopción masiva enfrenta retos: regulaciones confusas, riesgos de ciberataques (como hackeos a billeteras digitales) y la resistencia de quienes prefieren el efectivo. En México, donde mucha gente desconfía de los bancos, las criptomonedas podrían ser una oportunidad, pero hace falta educación financiera para evitar estafas. Además, la tokenización requiere leyes claras para proteger a los inversionistas, algo que aún está en pañales en América Latina.
En los próximos cinco años, veremos una economía diferente, más digital y descentralizada. Las criptomonedas no reemplazarán todo de golpe, pero serán tan comunes como pagar con tarjeta hoy. La tokenización abrirá puertas para que cualquiera invierta en propiedades, arte o hasta startups, sin importar dónde viva. Y la banca, queramos o no, tendrá que reinventarse o quedarse atrás. La pregunta no es si esta revolución llegará, sino si estamos listos para surfear la ola. Porque el futuro del dinero ya no está en nuestras manos, sino en una cadena de bloques que no para de crecer.
Octygeek / Alejandro del Valle Tokunhaga
Cofundador de Octopy empresa dedicada a la AI y robótica.
alejandro.delvalle@octopy.com