«La tecnología por sí misma no es transformativa.Es la escuela, los docentes,
la pedagogía, la que es transformativa»
Tanya Byron
La llegada de ChatGPT ha modificado la forma de hacer y aprender, muchos se encuentran embelesados con todo lo que esta tecnología puede hacer para simplificarle la vida al ser humano, en muchos países ya están utilizando robots hasta para realizar operaciones y por supuesto hasta para realizar las tareas básicas de la escuela.
Sin embargo, esta herramienta, como lo he mencionado en otros textos, por el enorme potencial que posee ha logrado que muchos profesionales sientan cierto temor de perder sus trabajos porque ven que esta tecnología los puede suplir muy fácilmente.
En este sentido, Un estudio elaborado por un equipo de investigadores de la Universidad de Princeton y la Universidad de Nueva York asegura que hay 20 empleos que están en peligro por el ascenso de la IA, entre los que se encuentran:
Teleoperadores, Profesores de Literatura, de lenguas extranjeras, de Historia, de Derecho de Religión y Filosofía, de Sociología, de Ciencias Políticas, del ámbito de la justicia criminal, de Psicología, de Ciencias de la Comunicación, de estudios culturales, de Geografía, de Biblioteconomía, Sociólogos, Trabajadores sociales, Científicos políticos, Árbitros, conciliadores y mediadores, Jueces y magistrados, Psicólogos clínicos y escolares.
Llama la atención en este listado, es que de 20 profesiones, 13 puntos se refiere a la “Profesores”, y resalta más cuando hemos leído que, en mayo de este año, Bill Gates considera que “la IA tiene potencial para ser tan buen profesor como cualquier persona especializada en un tema determinado”, enfatizando que cuando la inteligencia artificial esté en condiciones para iniciar un proceso que en dos años terminará con el reemplazo de los docentes, ya que es más económica que un profesor particular.
En la misma línea el científico informático Eric Cooke, ha asegurado que, en los próximos 15 años, las máquinas inteligentes reemplazarán en gran medida a los maestros humanos, por eficiencia, capacidad y efectividad, mientras que Anthony Sheldon, un educador e historiador británico, pronostica que para 2027, las máquinas inteligentes ya habrían reemplazado los docentes.
Contrario a ellos, Sam Altman, CEO de OpenAI y figura clave de ChatGPT, ha advertido que ciertos trabajos desaparecerán debido a la IA, pero hay uno que parece estar a salvo: el de los profesores, ya que seguirán siendo valiosos en el proceso de enseñanza y aprendizaje, enfatizando que las interacciones humanas preferirán tratarse con otros seres humanos, y aunque ChatGPT puede mejorar la educación personalizada, los profesores seguirán siendo esenciales para brindar una educación completa y adecuada.
Ante esto, solo recordemos que desde que la tecnología empezó a introducirse en el ámbito educativo, eso ya hace unas décadas, el presagio era que las computadoras iban a sustituir a los docentes, y en México, al menos, en un corto o mediano plazo no es seguro que suceda, y si bien, un aula ya no debe prescindir de la tecnología, la educación y el aprendizaje se da, no solo por el cúmulo de información que se acumule o genere, se da por que lo que un ser humano, su maestro o maestra es capaz de transmitirles al enseñarle a discernir entre la infinidad de recursos e información que les rodea, les enseña a gestionar sus emociones, a interactuar con otras personas, a ser solidarios, incentiva su desarrollo del lenguaje, su creatividad, es un motivador, es un guía… entre otras cosas, y eso al menos hasta hoy, no existe aplicación que sea capaz de reemplazar a nuestras maestras y maestros.
ROSALIA ZEFERINO SALGADO
Asesora en Comunicación Estratégica
e Imagen Pública