El cardenal mexicano, Javier Lozano Barragán, quien fue presidente del Pontificio Consejo para los operadores sanitarios desde 1996 a 1997, un cargo similar al de un “ministro de Sanidad” del Vaticano, falleció este miércoles en Roma, a los 89 años.
El cardenal sufrió la semana pasada una caída, por lo que fue trasladado a la Clínica San Pío Xi, pero salió el jueves 14 de abril porque se agotaron las opciones de tratamiento; padecía insuficiencia renal y otros problemas de salud.
El viernes 15, el papa Francisco lo visitó antes de dirigirse al Coliseo Romano para el Vía Crucis.
Javier Lozano Barragán fue nombrado obispo en 1979.
De 1985 a 1996 fue el obispo de Zacatecas.
En 1996 el papa Juan Pablo II lo nombró presidente del Pontificio Consejo para los Operadores Sanitarios.
En 2003, bajo el pontificado de Juan Pablo II, fue nombrado cardenal.
Dejó la presidencia del Pontificio Consejo para los Operadores Sanitarios en 2009, cuando presentó su renuncia a Benedicto XVI por edad.
El cardenal Lozano Barragán pidió no ser incinerado y será trasladado a Zamora, Michoacán, donde se encuentra su casa y la sede de la fundación dedicada a su madre Lolita.
Imagen: Especial