Este domingo, el Zócalo de la Ciudad de México fue escenario de un evento sin precedentes al albergar la tercera edición de la Clase Nacional de Boxeo 2025, que reunió a más de 42 mil personas y rompió récord de asistencia. La actividad fue encabezada por la presidenta Claudia Sheinbaum y la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Clara Brugada Molina.
Brugada celebró con entusiasmo la jornada deportiva y destacó el espíritu que inundó la capital. “Arranca en la Ciudad de México. Es la tercera ocasión que llenamos este Zócalo tricolor con energía, esperanza y determinación, a favor de la paz, del deporte, y haciendo un contundente nocaut a la violencia”, afirmó.
Durante su intervención, la mandataria local resaltó el ambiente festivo que se vivió no solo en la capital, sino en distintas plazas del país. “Con todos los grandes, con los mejores boxeadores de México y del mundo, arrancamos esta monumental clase de box. ¡Que viva la Ciudad de México!”, exclamó.
La clase tuvo una duración cercana a los 30 minutos y fue guiada por destacadas figuras del boxeo nacional e internacional, entre ellos Julio César Chávez, Óscar de la Hoya, Irma García, Roberto “Manos de Piedra” Durán, Carlos Zárate, Lourdes Yoana Juárez Trejo, Jessica Nery Plata Noriega, Rubén “Púas” Olivares, Marco Antonio Barrera y Rey Vargas.
En el evento, las y los participantes, vistiendo camisetas con los colores de la bandera mexicana, se desplegaron por toda la Plaza de la Constitución, generando un ambiente de unidad y entusiasmo.
Por su parte, la presidenta Claudia Sheinbaum destacó el papel del deporte en la transformación del país. “Las y los mexicanos tenemos un espíritu valiente, libre y justo; somos un pueblo solidario y profundamente fraterno”, expresó. Subrayó además que este tipo de iniciativas reafirman el compromiso con la paz y la prosperidad en México.
“Esta Clase Nacional de Boxeo es una muestra de que el deporte nos fortalece, nos hace más libres, más sanos y más felices; demuestra que cuando el pueblo se organiza no hay imposibles”, agregó la mandataria federal.
El Zócalo, convertido en un gigantesco ring al aire libre, fue testigo de una jornada que promovió la actividad física, la unión y un mensaje claro: decir sí a la paz y no a la violencia.