AFP
Seis personas murieron y 91 resultaron heridas en los bombardeos israelíes de este viernes (27) en los suburbios del sur de Beirut, bastión del movimiento islamista Hezbollah, según el Ministerio de Salud libanés.
El ministerio había dado previamente una primera estimación de dos muertos y 76 heridos, añadiendo que los rescatistas continúan buscando supervivientes bajo los escombros.
Siete edificios fueron arrasados por el ataque, según la cadena de televisión Al Manar, afiliada al movimiento proiraní.
Israel indicó que atacó el cuartel general de Hezbollah en "un ataque de precisión".
Al Manar informó que los escombros dificultaban a los equipos de rescate encontrar posibles supervivientes.
"Se están haciendo enormes esfuerzos en condiciones difíciles debido a los escombros en el lugar del bombardeo en Haret Hreik", informó la emisora citando a su corresponsal en el lugar.
Según varias emisoras israelíes, el objetivo del ataque era el jefe de Hezbollah, Hassan Nasrallah, que se encuentra a salvo, según una fuente cercana al movimiento.
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