La Casa de Nariño se convirtió en el centro de una reunión crucial liderada por el presidente de la República, Gustavo Petro, para abordar el creciente desafío de la viruela del mono, o viruela símica, en Colombia. En esta jornada, el mandatario convocó a su equipo de Gobierno para evaluar y fortalecer las estrategias nacionales contra esta enfermedad, declarada como una emergencia internacional por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
El encuentro, que se extendió por varias horas, marcó el inicio de una serie de reuniones programadas para explorar alternativas con distintos sectores y enfrentar los desafíos que plantea la viruela símica. El objetivo principal del presidente Petro fue subrayar la necesidad de un “monitoreo permanente” y una respuesta coordinada ante esta amenaza de salud pública.
Durante la reunión, se discutieron varios puntos críticos, entre los que destacó la evaluación de las capacidades del sistema de salud para detectar, aislar y tratar a los pacientes afectados. Según el reporte del Departamento Administrativo de la Presidencia (Dapre), se revisaron las capacidades de diagnóstico de los laboratorios nacionales, así como la disponibilidad de recursos médicos necesarios para enfrentar la enfermedad. Esto incluye equipos de protección personal para el personal sanitario, camas hospitalarias y medicamentos adecuados para el tratamiento de la viruela símica.
El presidente Petro enfatizó el compromiso del Gobierno de actuar con celeridad ante cualquier amenaza a la salud pública, especialmente en el contexto de la progresión de la viruela símica en otras regiones del mundo, como África. La reunión también contó con la presencia de los ministros de Salud, Guillermo Alfonso Jaramillo, y del Interior, Juan Fernando Cristo, quienes destacaron la importancia de fortalecer la vigilancia epidemiológica.
Otro tema central fue la coordinación entre instituciones de salud pública, gobiernos regionales y locales, y organismos internacionales. Se subrayó la necesidad de garantizar una respuesta oportuna y eficaz mediante una red de vigilancia robusta. Este enfoque se alineó con el compromiso del Gobierno de mantener una respuesta adaptativa y efectiva, similar a la que se implementó durante la pandemia del COVID-19, aunque con un impacto aún menor en la población actual.
La reunión también incluyó un análisis detallado de las características epidemiológicas de la viruela símica, su modo de transmisión y los grupos más vulnerables al contagio. Los expertos en salud proporcionaron información valiosa para desarrollar estrategias adecuadas y prepararse para posibles brotes emergentes.
En conclusión, el presidente Petro reiteró el compromiso del Gobierno de mejorar continuamente la preparación y respuesta del sistema sanitario ante la viruela símica. La coordinación desde el nivel nacional hasta el local, junto con una vigilancia y respuesta efectiva, serán clave para proteger a los ciudadanos y enfrentar esta nueva amenaza de salud pública.