Por Angélica Patiño
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Quienes vandalizaron el lunes el centro de la Ciudad de México tenían el objetivo de mostrar a la policía reprimiendo una movilización, pero “se quedaron con las ganas”, afirmó la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum.
En conferencia virtual y cuestionada sobre los hechos violentos ocasionados por los llamados anarquistas, aseguró que “ellos querían que la policía golpeara, empujara o hiciera algo contra las personas que organizaron la concentración.
La policía no evitó los saqueos, agresiones y destrozos para no caer en provocación, dijo luego de dejar claro que “a veces es muy fácil decir que la policía entre, que la policía haga, pero que la policía resista también tiene sus virtudes y ayer se quedaron con las ganas de ver a policías reprimiendo”.
Al cuestionarle a quiénes se refería como los que buscan “provocar” a su Gobierno, no lo especificó.
En lugar de acusar a quienes dirigen, pidió a la ciudadanía pensar a quién ayudan y qué es lo que buscan con esos actos.
Reconoció que su gobierno debe trabajar en “protocolos que nos permitan, sin reprimir, sin usar el abuso policial, frenar también algunas de las acciones que se cometieron”. Lo sucedido, añadió, es un caso especial que se disfraza de protesta e insistió en que se deben mejorar los protocolos policiales.
Más tarde, se dio a conocer que la Fiscalía de Investigación Territorial en Cuauhtémoc tiene iniciadas seis carpetas de investigación por los destrozos causados durante la manifestación del lunes.
Las denuncias fueron presentadas por los representantes jurídicos de establecimientos afectados, entre los que se cuentan sucursales bancarias y una tienda de ropa.