Cientos de rusos desfilaron en Moscú frente a la tumba de Alexéi Navalni, principal detractor de Vladimir Putin muerto en prisión, para rendirle homenaje, al día siguiente de un funeral y a pesar de las advertencias del Kremlin.
Por la tarde y bajo un sol de invierno, decenas de personas hacían fila frente a la sepultura del opositor llevando ramos de flores, constató un periodista de la AFP.
Al igual que el día anterior, la policía instaló pórticos de detección de metales en la entrada del cementerio.
Algunas de las personas que vinieron, muchos de ellos jóvenes que son la base de apoyo de Navalni, pasaron delante de la tumba del opositor con lágrimas en los ojos.
Navalni, el crítico más acérrimo del presidente Vladimir Putin durante más de una década, murió a los 47 años en una colonia penitenciaria del Ártico el mes pasado, donde cumplía una condena de 19 años por acusaciones de "extremismo", en condiciones todavía por esclarecer.
Su madre, Liudmila Navalnaya, visitó su tumba, cubierta de flores y coronas, en el cementerio de Borisovo, en el sur de Moscú, a primera hora de la mañana del sábado, constataron periodistas de la AFP.
La acompañaba Alla Abrosimova, madre de la viuda de Navalni, Yulia Navalnaya.
Yulia Navalnaya, los dos hijos de la pareja y el hermano de Navalni viven todos en el extranjero y no asistieron al funeral, por temor a ser detenidos.
La viuda del opositor se comprometió a continuar la labor de su marido y responsabilizó a Putin de su muerte.
Con información de AFP
Imagen: AFP