Un trágico accidente aéreo ocurrido el pasado jueves en el río Hudson, entre Nueva York y Jersey City, dejó un saldo de seis personas fallecidas: una familia española compuesta por dos adultos y tres menores, además del piloto estadounidense. La Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB, por sus siglas en inglés) confirmó recientemente que el helicóptero siniestrado “no contaba con sistemas de grabación del vuelo ni con cámaras”, lo que complica las labores de investigación.
La NTSB, encargada de esclarecer las causas del accidente, señaló que hasta ahora no se han recuperado dispositivos de grabación ni material audiovisual del interior de la aeronave. Actualmente, 17 especialistas de esta agencia continúan con las tareas de búsqueda de evidencia en el lugar de los hechos.
Además, los investigadores han iniciado el análisis del sistema de control de vuelo del helicóptero y ya se han reunido con representantes de la empresa responsable del servicio aéreo para revisar sus procedimientos operativos.
Las víctimas españolas fueron identificadas como Agustín Escobar, alto ejecutivo de Siemens; su esposa, Mercè Camprubí; y sus hijos de 10, 8 y 4 años. El piloto, Seankese "Sean" Johnson, era un exmilitar afroamericano de 36 años.
El accidente ocurrió alrededor de las 15:15 horas locales (19:15 GMT), cuando el helicóptero se precipitó sobre el río y perdió partes de su fuselaje antes de impactar contra el agua. La emergencia movilizó a buzos del Departamento de Bomberos, así como a la Policía de Nueva York y de Jersey City, quienes lograron recuperar los cuerpos y los restos principales del aparato.
Aún se mantienen operativos de búsqueda en la costa de Jersey City, donde continúan los trabajos para localizar partes del helicóptero que se encuentran sumergidas, incluyendo el rotor principal y el de cola, que se estima están a unos 12 metros de profundidad.
El viernes, la NTSB aseguró que manejan varias líneas de investigación, aunque reiteraron que “se quiere evitar la especulación” mientras el proceso sigue en curso.
Desde 1977, al menos 32 personas han perdido la vida en accidentes de helicóptero en la ciudad de Nueva York. El incidente más grave antes del ocurrido el jueves tuvo lugar en 2018, cuando cinco de los seis ocupantes de un helicóptero turístico fallecieron tras caer al East River.