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El presidente Gustavo Petro explicó que su ausencia el 30 de agosto en un encuentro de justicia en Chocó se debió a una crisis emocional por la despedida de su hija, Antonella Petro, quien se va del país. "He despedido a muchos de mis hijos (...), mi última hija se va", expresó el mandatario, destacando la dificultad de enfrentarse a este momento.
Petro confesó que la situación lo impactó profundamente, al punto de no poder asistir a compromisos oficiales. "Ayer incumplí con actos públicos (...) pero no tenía la fuerza para pararme ante un auditorio y hablar cuando mi corazón estaba llorando", declaró. Según el presidente, Antonella ha sufrido persecución, incluso en su colegio, lo que añadió peso emocional a su partida.
El 30 de agosto de 2024, Petro tenía programados dos encuentros: una precumbre campesina en Fusagasugá y un encuentro de justicia en Quibdó, Chocó. No obstante, canceló su agenda y no apareció en público ni en redes sociales. Estas declaraciones fueron hechas en Nuquí, donde presidió la posesión de Iris Marín como nueva defensora del pueblo, quien asumirá el cargo el 1 de septiembre.