La historia económica de Colombia parece estar marcada por un patrón que se repite: las reformas tributarias. En las últimas dos décadas, el país ha experimentado un total de 12 reformas fiscales, y de aprobarse la nueva ley propuesta por el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, bajo el mandato de Gustavo Petro, esta cifra ascendería a 13.
El reciente proyecto, presentado como una "nueva ley de financiamiento", incluye propuestas como la reducción de la tarifa de renta corporativa, pero no es un hecho aislado. De acuerdo con algunos analistas, las reformas tributarias se han convertido en un mecanismo recurrente de financiación para los gobiernos, ya que se presentan en promedio cada 1.7 años.
Un análisis de las últimas nueve reformas, solo considerando el primer año de recaudo, indica que estas sumaron un total de $77 billones, cifra que podría elevarse a $89 billones si se aprueba la segunda reforma de Petro. Entre los impuestos más persistentes están el 4x1.000 y el aumento del IVA al 19%, que originalmente fueron concebidos como temporales, pero continúan vigentes.
Durante las dos administraciones del expresidente Álvaro Uribe Vélez, se implementaron cuatro reformas tributarias: la Ley 788, la Ley 863, la Ley 1111 y la Ley 1370. Jaime Enrique Gómez, socio de Posse Herrera Ruiz, destaca que "se dio una destinación específica del impuesto al patrimonio para cubrir necesidades de defensa y seguridad nacional". Además, en este periodo se introdujo el capítulo sobre precios de transferencia en el estatuto tributario, lo cual fortaleció la lucha contra la evasión entre compañías con vínculos en el exterior.
Uribe también impuso la obligación de que los inversionistas extranjeros presentaran declaración de renta por la venta de participaciones accionarias en Colombia, con el fin de combatir la evasión fiscal.
El expresidente Juan Manuel Santos también llevó a cabo cuatro reformas tributarias durante su mandato: la Ley 1430, la Ley 1607, la Ley 1739 y la Ley 1819. Estas reformas introdujeron cambios profundos, como una nueva contabilidad bajo el marco técnico contable para las empresas. Juan David Velasco, socio tributario de Baker McKenzie, señaló que este periodo "cambió absolutamente la forma de depurar el impuesto sobre la renta".
Además, durante el mandato de Santos se impulsaron medidas que facilitaron la internacionalización del país, como la profundización del régimen de entidades controladas en el exterior y disposiciones para evitar el abuso tributario, lo que permitió a Colombia ingresar a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
El expresidente Iván Duque presentó tres proyectos de reforma, aunque solo dos fueron aprobados debido a que la Ley 1943 de 2018 fue declarada inconstitucional. No obstante, su contenido fue rescatado bajo la Ley 2010 de 2019. Estas reformas, impulsadas por el exministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, y posteriormente por José Manuel Restrepo, incluyeron el régimen simple de tributación, la normalización tributaria y los tres días sin IVA.
La primera reforma tributaria del gobierno de Gustavo Petro, liderada por José Antonio Ocampo, se materializó en la Ley 2277. Sin embargo, esta ley enfrentó un revés cuando la Corte Constitucional prohibió la deducibilidad de las regalías minero energéticas. A pesar de ello, la ley logró introducir nuevos impuestos, como el de los plásticos de un solo uso.