El 1º de mayo entró en vigor el acuerdo por el que aumentan 100 por ciento las remuneraciones que reciben las médicas y médicos internos de pregrado y crece de forma sustantiva el monto de las becas para pasantes de investigación, medicina, enfermería, odontología, atención médica y regulación sanitaria.
En entrevista, el titular de la Dirección General de Calidad y Educación en Salud (DGCES) de la Secretaría de Salud, José Luis García Ceja, explicó que por instrucciones del secretario Jorge Alcocer Varela, se emprendió el esfuerzo de mejorar las condiciones generales para el desempeño de la labor de médicas y médicos internos de pregrado y pasantes de servicio social. Producto de ello es el acuerdo publicado a principios de mayo.
Explicó que mujeres y hombres médicos internos de pregrado son estudiantes en formación que cursan quinto año de la carrera de medicina. Este internado se estableció en México el 1º de enero de 1962 con la suma de esfuerzos de autoridades de salud y de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), como mecanismo que permite a estudiantes de medicina incorporarse a unidades de salud y familiarizarse con la atención directa a pacientes, al tiempo que finalizan sus estudios.
En tanto, el servicio social dura 12 meses, corresponde al sexto año de la carrera de medicina; es un requisito para realizar el examen profesional y obtener el título.
La modificación al tabulador de becas, que había permanecido igual desde 2016, constituye una mejoría significativa para quienes aspiran a convertirse en profesionales de la salud, e incentiva de forma efectiva su labor en zonas calificadas como de alta o muy alta marginación.
Mencionó que el tabulador considera diferentes categorías que corresponden a la zona donde se realiza el internado o el servicio social, y al número de horas y días trabajados a lo largo de un año.
Las plazas tipo A corresponden a zonas urbanas e implican laborar seis horas al día por cinco días a la semana; las plazas tipo B contemplan entre siete y ocho horas diarias de actividades por seis días a la semana en zonas semiurbanas; las plazas tipo C y doble C son para áreas de alta o muy alta marginación con jornadas de ocho horas por día durante seis días a la semana.
Detalló que un interno o interna de pregrado pasó de percibir una beca mensual de dos mil 309 pesos, a cuatro mil 620 pesos, con los cambios al tabulador que entraron en vigor el 1º de mayo, es decir, aumentó 100 por ciento.
El acuerdo, publicado en el sitio electrónico del Comité de Mejora Regulatoria Interna (Comeri) señala que, adicionalmente, las y los internos de pregrado y pasantes recibirán una compensación equivalente a un mes de beca al terminar el internado o el servicio social. Asimismo, internos de pregrado y pasantes de investigación en medicina recibirán un apoyo cada trimestre para material didáctico.
Explicó que el internado se realiza en hospitales, y el servicio social en hospitales y centros de salud; esto, en apego a la Norma Oficial Mexicana 033 que determina las características y condiciones mínimas necesarias para que un establecimiento sea sede receptora de internos de pregrado.
En la norma se establece que los centros receptores deben tener instalaciones adecuadas, áreas de higiene personal y de descanso y un número máximo de camas por interno, para garantizar óptimas condiciones médicas y médicos en formación.
Resaltó que esta modificación a los tabuladores es un paso importante en el esfuerzo por dignificar la figura de estos aspirantes a profesionales de la salud, al tiempo que se generan incentivos para contar con personal en los lugares donde más se necesita, es decir, las zonas de menor desarrollo económico.
En este sentido, hasta mil pasantes de medicina “CC” y mil de enfermería “CC”, que prestan servicio social en áreas de bajo desarrollo recibirán adicionalmente un importe mensual de ayuda por desempeño.
Imagen: Gobierno México